19 de Septiembre 2022
Introducción
Actualmente, la isotretinoína es parte del tratamiento base del acné; ha favorecido el pronóstico y mejorado la calidad de vida de distintos pacientes que lo utilizan para esta u otras patologías dermatológicas; sin embargo, es bien conocido que su uso trae consigo distintos efectos adversos para tomarse a consideración, siendo más relevantes las mialgias y la elevación de creatincinasa sérica llevándonos al sobrediagnóstico de rabdomiólisis, una patología con baja prevalencia y aún menor reporte de casos con esta etiología.
La presencia de mialgias se reporta hasta en un 25% de los paciente, cuando la isotretinoína es administrada en dosis altas, por otro lado, la elevación de la creatincinasa (CK) es más conocida, siendo un fenómeno benigno y autolimitado que rara vez aumenta más de 5 veces su valor. Se han reportado pocos casos, entre ellos sólo uno asociado a rabdomiólisis fatal, por lo que la falta de divulgación provoca que se considere como una urgencia y se realicen abordajes diagnósticos que pueden no ser necesarios; es por esto que radica la importancia de conocer este efecto adverso común con el uso de este fármaco.
Caso clínico
Se trata de masculino de 19 años, con antecedentes: alergias negadas, niega hábitos tóxicos, acné vulgar diagnosticado en 2019 sin tratamiento previo. Refiere inicio de tratamiento hace 5 meses para acné vulgar con isotretinoína 10 mg cada 24 horas, siendo administrado de forma intermitente, cursando 2 meses con tratamiento continuo, 1 mes sin tratamiento y reiniciando el mismo hace 2 meses de forma continua nuevamente.
Por lo ya descrito, se mantiene bajo vigilancia con servicio de dermatología y se realiza estudios de laboratorio de control una semana previa a su valoración, donde se reportan niveles de CK: 17866, creatinina: 1.09, magnesio: 2.4, AST: 217, ALT: 180, LDH: 535.
Al interrogatorio dirigido, paciente se refiere asintomático, niega mialgias, cambios en coloración de orina, debilidad, rigidez, parestesias, paresias, taquicardia, dolor abdominal, náusea y vómito, así como niega antecedente de ejercicio extenuante o exposición a otros fármacos. Acude al servicio de urgencias por hallazgos de laboratorio, donde es valorado y se encuentra sin alteraciones a la exploración física, por lo que se repiten estudios de laboratorio encontrándose los siguientes resultados: CK: 477.6 Mioglobina: 91.3, Sodio: 138.9, Potasio: 4.0, Cloro: 103.1 CO2: 25.26, Glucosa: 75.5, Creatinina: 1.13, Calcio: 9.97, Proteinas totales: 8.3, Albúmina: 5.19 Globulina: 3.11, AST: 29, LDH: 106.8.
Examen general de orina: Amarillo, claro, 1.01, urobilinógeno <2.0 mg/dl.
Con lo anterior y se observa mejoría notable en cifras de CK; sin embargo, se decide su ingreso hospitalario y se decide iniciar reposición hídrica para forzar diuresis y revaloración en 24 horas con medición de niveles de CK.
Se toman estudios de control a las 24 horas donde se reporta CK en 263.3, Mioglobina en 50.3 y creatinina en 0.9, por lo que se decide su egreso hospitalario para seguimiento ambulatorio.
Conclusión
La rabdomiólisis es un síndrome caracterizado por necrosis muscular y la liberación de constituyentes musculares intracelulares a la circulación, CK suele estar marcadamente elevada y puede haber dolor muscular y mioglobinuria. La gravedad de la enfermedad varía desde elevaciones asintomáticas hasta enfermedades potencialmente mortales por elevaciones extremas de las enzimas, desequilibrios electrolíticos y lesión renal aguda.
La fisiopatología general consiste en que un evento puede desencadenar la muerte de las células musculares, lo que lleva a un aumento del calcio citoplasmático y mitocondrial ionizado libre intracelular, llevando en conclusión al agotamiento de ATP, así como activación de proteasas, aumento de contractilidad de las células del músculo esquelético, disfunción mitocondrial y producción de especies reactivas de O2, llevando a muerte de células del músculo, asimismo a lesión de miocitos y liberación de mioglobina, el cual es nefrotóxico.
Secundario a fármacos es poco frecuente y se ha encontrado que su relación con isotretinoína se reporta en aproximadamente en 5.5% de los pacientes, siendo regularmente un hallazgo de laboratorio.
Ante un caso de rabdomiólisis, se tiene que realizar un abordaje que inicie desde la anamnesis y exploración física, todo intencionado con los antecedentes y síntomas ya conocidos: ejercicio excesivo, consumo de sustancias, fármacos, hipertermia, miopatías metabólicas, trastornos hidroelectrolíticos, síntomas tales como: mialgias, parestesias, debilidad, cambios en color de orina, calambres y signos como edema, cambios en coloración de piel o ampollas.
Respecto a estudios complementarios, siempre medir CK y otras enzimas musculares, tales como la mioglobina, asimismo, realizar examen general de orina en búsqueda de mioglobinuria, medir VSG, PCR en búsqueda de otras etiologías y medición de electrolitos séricos en búsqueda de trastornos hidroelectrolíticos, así como la búsqueda intencionada de lesión renal aguda en una química sanguínea.
Cuando hablamos del tratamiento, lo principal en el manejo de una rabdomiólisis es la administración de volumen para prevención de la lesión renal aguda, mejorando la perfusión renal, minimizando la lesión isquémica y aumentar tasa de flujo de orina. Deben administrarse soluciones cristaloides por metas y se continúa hasta que la lesión se resuelva, aunque no hay un límite de reposición óptimo.
El uso de bicarbonato puede beneficiar cuando existe rabdomiólisis grave.
Por último, el uso de manitol es únicamente protector, al causar diuresis que disminuya la deposición de pigmento hemo intratubular y formación de cilindros, así como eliminador de radicales libres, minimizando el daño celular.
Como conclusión y una vez teniendo claro el contexto de la rabdomiólisis, es importante aclarar que, en este caso clínico, no cursó con este diagnóstico, sino únicamente fue un hallazgo secundario a la administración de isotretinoína, un hallazgo común que al ser desconocido, lleva al sobre diagnóstico y confusión con sus diagnósticos diferenciales, por lo que debemos hacer énfasis en conocer más a fondo esta reacción adversa y hacer de conocimiento al paciente sobre lo que esto implica.
Bibliografía y lectura recomendada:
Morgado-Carrasco D, et al. Rabdomiolisis grave asociada al tratamiento con bajas dosis de isotretinoína. Actas Dermosifiliogr. 2020. https://doi.org/10.1016/j.ad.2018.08.016
Gómez-Bernal S, Rodríguez-Pazos L, Rodríguez-Granados M. Rabdomiólisis durante el tratamiento con isotretinoína. Actas Dermosifiliogr. 2011. DOI: 10.1016/j.ad.2010.07.010
Shefner, J. Causes of rhabdomyolysis. En: UpToDate, Targoff, I (Ed), UpToDate, Abril 29, 2022. (Consultado en Agosto 29, 2022)
Shefner, J. Clinical manifestations and diagnosis of rhabdomyolysis. En: UpToDate, Targoff, I (Ed), UpToDate, Mayo 10, 2022. (Consultado en Agosto 29, 2022)
Cite este artículo como:
Karla Gutierrez, “Elevación de creatincinasa secundario a uso de isotretinoína como tratamiento de acné vulgar”. blog EMergiendo SMME, septiembre 2022. Disponible en: https://emergiendo.org.
Editor revisor: Dra. Silvia Elena Uribe Moya